El pasado día 20 de octubre nos trasladamos a A Coruña para sumergirnos en INTERSECCIÓN, Festival de Arte Audiovisual Contemporáneo, una iniciativa que se centra en exhibir obras audiovisuales creadas dentro del cruce del arte contemporáneo y el cine de vanguardia. En esta quinta edición, INTERSECCIÓN reflejaba, desde un lente poético, la crisis ecológica a la que nos estamos enfrentando.
El festival tuvo lugar en tres sedes, la principal el Cine París, un edificio histórico -recientemente rehabilitado, y muy querido por todos los habitantes de la ciudad que, curiosos, se pegaban a los ventanales para intentar descubrir qué estaba ocurriendo dentro; la segunda sede (mucho más amable con el espectador) era la Filmoteca de Galicia, que acogía un ciclo de películas diario; y terminaba el recorrido en la Fundación Luis Seoane donde podía visitarse la exposición Escolas, comisariada por Arte.Facto, en la que participaban estudiantes de la Universidad de Vigo.
Las películas se dividían en diferentes secciones: una sección internacional que, entre muchas piezas, contaba con El concierto para el bioceno de Eugenio Ampudia, un corto reconocible para todos los amantes del arte contemporáneo. Además, entre las piezas exhibidas queremos destacar A.O.K de Christopher Tym, un ‘pseudo’ video documental que cuenta la experiencia de grabar un videoclip de música pop, a través de las sensaciones de cada uno de los partícipes en la producción. Merece la pena por la locura sensorial en la que te ves envuelto.
La sección, Galicia, fue creada para apoyar la creación contemporánea de la tierra exhibiendo obras de más de 35 artistas gallegos. Además, esta sección de INTERSECCIÓN se completó con un foco (monográfico) dedicado a la cineasta ferrolana Blanca Rego. «Las piezas de este foco son resultado y testimonio de un profundo afecto y fascinación por el medio cinematográfico como herramienta plástica poniendo de manifiesto la riqueza material del cine digital. Las imágenes de Blanca Rego, como en un teatro de sombras, nos transportan a la escena de la luz y el color, la del sonido, que se entremezclan, cambian posiciones, se sustituyen mutuamente en un intercambio sinestésico, jugando en el metalenguaje, pero también en un plano emocional y poético.»
Volviendo al cine internacional encontramos Una caída, una fractura, una posibilidad, una sección en la que se intentó explicar la sensación de perdida que estamos experimentando y provocando. Una interesante reflexión sobre lo que estamos haciendo con el planeta y lo que estamos perdiendo por el camino hacia ese mundo que nos habían prometido y que se ha descubierto que era un espejismo.
Enlazando con esta sección, se encontraba el Foco dedicado a la artista Pauline Julier. Su trabajo «explora los vínculos que el ser humano crea con su entorno a través de historias, rituales, conocimientos e imágenes. Sus películas e instalaciones se componen de elementos de origen diverso para restituir la complejidad de nuestra relación con el mundo.» Muy recomendable su proyecto Naturales Historiae sobre la obsesión de capturar el paisaje a lo largo de la historia.
Otro director que tuvo un foco fue Daniel Blaufuks. Leonor Lloret explica que «su trabajo como cineasta se coloca en la frontera entre la imagen congelada, que es la fotografía, y el potencial de esa misma imagen en expansión. En el cómputo de su obra, el cine es introducido ofreciendo la posibilidad de lo atemporal. (…) Sus películas, al igual que su trabajo fotográfico, continúan partiendo del “yo”, de su experiencia e historia personal, de su realidad y sus preocupaciones con el tiempo y la memoria, y así mismo, en lo que deja entreabierto, lo que mantiene en suspensión temporal. Introduce el vacío poético de lo que nos trasciende y nos une como seres humanos. Establece de esta forma maestra lazos con el espectador, el “yo” repercutido en el “nosotros”.
Terminamos reseñando el foco dedicado a Flatform, un colectivo de artistas con base en Milán y Berlín. Noa Castro Lema explica: «Las imágenes de Flatform tienen una poesía que nace en el interés constante en prestar atención a estos otros tiempos que intersectan al fin nuestras vidas, y en darles cabida o forma visible en la ilusión maravillosa que es la imagen en movimiento. El protagonismo se comparte y distribuye de manera equitativa, de forma que se torna espacial, colectivo, multitemporal, desapareciendo el espectador humano un poco, aunque no del todo.»
Ganadores de la quinta edición de INTERSECCIÓN
Llegado el último día del festival, se habían proyectado más de 100 películas de diferentes corrientes y estilos artísticos. ¿Cuáles fueron las películas destacadas por el jurado especializado? En la sección Internacional ganó el proyecto “Super Natural” de Jorge Jácome y se hizo una mención especial para “Fe” de Maider Fernández.
El premio del jurado en la sección Galicia fue para “Elefante” de Alberte Pagán, con una mención especial para “The Softboy” de Laura Tabarés y “Contra la imagen, fuego escita” de Roi Fernández. El Premio A Colectiva recae, también para “Elefante” de Alberte Pagán y el Premio Contemporánea es para “XotaManeoMuiñeiraPasodobleRumba” de Juan López.
En la sección Escolas, el premio del jurado es para “La fiesta del fin del mundo” de Paula González García, Andrés Santacruz y Gloria Gutiérrez. La mención especial es para “O tempo é conmigo” de Clara Borrazás Franco.
Otros premios, el Premio NUMAX se concedió a “Super Natural” de Jorge Jácome. El Premio MAV recayó en “A body is a body is a body” de Cat & Éiméar McClay. La mención especial del jurado ex-aequo a “The Softboy” de Laura Tabarés y a “Pensamiento sonoro” de Mónica Mura. El premio del público se otorgó a “La piel de Marte” de Maite Redondo.
Por último, los premios de Intersección LAB fueron: el Premio LAB corte final ex-aequo para “Amor rojo” de Dora García y “Alén Mar” de Andrés Sanjurjo y el Premio Sonido Cinemar Films para “Alén Mar” de Andrés Sanjurjo.
Etiquetas: INTERSECCIÓN Última modificación: 24 octubre, 2022
