Sofya96 (Zaragoza, 1996). Vive y trabaja en Berlín. Grado en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona. (2019). Artistas multidisciplinar. Obra gráfica. Videoinstalación. Desarrolla su trabajo a partir de diversos modos de producción artística dada la capacidad que percibe en ellos para repensar la realidad e incluso para subvertirla. Su práctica multidisciplinar de enfoque transfeminista e interseccional que se entrelaza inevitablemente con los activismos y la experiencia encarnada, se centra en el cuestionamiento semiótico de las imágenes teniendo en cuenta que estas operan en un marco político, social, y económico supeditado a relaciones de poder.
Te proyectas desde Berlín. ¿Te hubiera gustado cambiar de lugar y hacerlo desde allí?
Vivo en Berlín, pero no diría que me proyecto desde allí. Más bien resido en Alemania porque las condiciones del trabajo asalariado que tengo me permiten tener tiempo para desarrollar mi práctica artística de manera independiente. Cambié de lugar por esa razón, ya que en España lo veía bastante más improbable, y por eso decidí quedarme.
¿Crees que tu trayectoria habría sido la misma?
No claro. Cuando te vas dejas todo lo que construiste atrás y te toca empezar a crear todo eso de nuevo por lo que cambia tu trayectoria y todo lo demás.
¿Qué te impulsa a dedicarte a la práctica artística?
La necesidad. A mí me interesa la práctica artística que nace de la necesidad, desde algo que decir, para entender algo que aún no comprendes, o hasta para sacar aquello que duele. La práctica artística tal y como yo la entiendo es algo cercano en primera instancia. Una práctica cotidiana como cantar o pasear algo que cualquiera puede llevar a cabo. Luego dedicarse a ello o intentarlo es otra historia.
¿Qué ansiabas?
Con mi práctica artística diría que siempre busqué una mezcla entre sentirme bien, una especie de alivio, y conocer gente, que pasen cosas.
¿Lo encontraste?
Lo sigo buscando. Hay que seguir practicándolo, si no deja de ser práctica artística.
¿Qué crees que puede mejorarse en el Sistema del arte?
La primera pregunta que me hago es si acaso existe un sistema del arte al que tomar como referencia, entendiendo que el sistema del arte va ligado al resto de sistemas que componen una sociedad.
Lo que creo que deberíamos es dejar de mirar hacia occidente y por tanto hacia el sistema del arte occidental en primer lugar. Tanto la sociedad occidental como, claro, su sistema del arte, son per se imperialistas y coloniales, ya que defienden lógicas de muerte y devastación. Sobran ejemplos actuales de como las grandes instituciones artísticas en nuestros territorios están siendo cómplices del genocidio al pueblo palestino mientras llenan sus programas con narrativas decoloniales vacías de significado.
¿Qué deberíamos aportar y eliminar al Sistema?
Me gusta creer en el arte como herramienta para resquebrajar esas lógicas. No podemos seguir referenciando a un sistema -en este caso artístico- que produce y reproduce ese desgaste o anulación de la vida. Concibo el arte como motor que genera, que se pregunta, que moviliza, por lo que nos haría falta aprender de todos aquellos ecosistemas artísticos y culturales que están consiguiendo esto.
Asociacionismo profesional ¿qué opinas?
Imprescindible. Un ejemplo de asociacionismo cultural es la iniciativa Strike Germany, una huelga que llama a todos los trabajadores culturales a sumarse para rechazar el uso por parte de las instituciones culturales alemanas de políticas que reprimen la libertad de expresión, concretamente las expresiones de solidaridad con Palestina. Esta iniciativa surge en respuesta a la persecución política que se está viviendo en Berlín en el campo de la cultura.
Háblanos un poco de tu trayectoria.
Mi trayectoria comenzaría en Barcelona. Mientras estudiaba, organizábamos muchas exposiciones colectivas en lugares autogestionados y estaba involucrada principalmente en el movimiento estudiantil de la facultad. Entremedio me mudé a Berlín para estudiar en la Universität der Künste [UdK] y decidí quedarme por un tiempo más. En aquel entonces participé de varias exposiciones colectivas en la Estonian House y en la Eingangshalle & Quer Galerie.
Llegué a Berlín esta segunda vez gracias a una beca de la Universidad de Zaragoza con la que realicé unas prácticas en el Center for Art and Urbanistics [ZK/U]. En ese momento estaba desarrollando un proyecto que comencé en las residencias del Bòlit Centre d’Art Contemporani de Girona en 2021 y que inauguré con el apoyo del mismo al año siguiente. El tiempo que llevo viviendo en Berlín -que ahora van a ser casi tres años- lo he dedicado casi enteramente a la realización de este proyecto que tomó por nombre “Una mamá de un millón”.
“Una mamá de un millón” ha tenido muy buena acogida tanto en Cataluña como en Aragón que son los dos lugares con los que tengo más conexión. Con este trabajo recibí el primer premio del IV Premio Jóvenes Creadores Aragoneses CREAR y planeamos exponerlo en Barcelona en el Centre de Cultura de Dones Francesca Bonnemaison para el año que viene. Ahora sigo trabajando para que “Una mamá de un millón” continúe con su itinerancia ojalá con la misma buena acogida.
Defínete mediante hashtags o etiquetas.
#ArtistaVisual #Archiva #Genealogías #MemoriaHistórica #DisabilityStudies #Anticapacitismo #Disfuncional #Transfeminista
¿Cuáles son los temas de tu trabajo artístico?
Me gustaría pensar que no trabajo por temáticas. Más bien hay un hilo conductor en todos mis trabajos que sería el interés por la experiencia encarnada. Acudir a las historias de una misma para sacarlas a lo colectivo y que no se queden en lo individual, ni caigan en esencialismos.
¿Algún proyecto, pendiente, que te gustaría realizar?
Sí, claro, siempre hay muchos proyectos pendientes (ja, ja, ja). Me gustaría poder continuar un trabajo de investigación artística que empecé en 2019 y que se llamó Archivo Disfuncional. Imágenes para una revuelta contra la violencia simbólica; un archivo de imágenes fijas en torno a la discapacidad y/o diversidad funcional y sus representaciones en el estado español durante los siglos XX y XXI.
El archivo cuenta por ahora con alrededor de trescientas imágenes fijas, que recogen visualmente el tratamiento histórico que se ha hecho en el estado español de la discapacidad desde el franquismo hasta la actualidad. Por esto mismo el archivo se convierte en un dispositivo clave para la investigación artística con el que entender de qué imaginarios partimos como sociedad y hacia cuales podemos caminar.
El archivo podría ser de interés tanto para investigadores o artistas que realicen un trabajo de memoria histórica sobre el tema como para colectivos que quieran indagar en el pasado de su propia lucha.
Archivo Disfuncional busca generar a largo plazo un espacio colectivo donde poder pensar, comprender, y cuestionar lo semiótico de las imágenes en torno a la discapacidad y/o la diversidad funcional. Pero para eso antes me gustaría volcar el material del archivo en una plataforma digital con el deseo de llevar la propuesta junto con más gente y que crezca de manera colectiva.
Un deseo.
Palestina libre
