Irene Cruz (Madrid, 1987). Vive y trabaja en Berlín desde 2013. Licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas (2010) y Comunicación Audiovisual (2010) por la Universidad Complutense de Madrid. Máster internacional en Fotografía conceptual y creación artística (2011) y Curso especializado sobre iluminación narrativa cinematográfica (2013), por la Escuela de Fotografía y Técnicos de Imagen [EFTI]. Se dedica plenamente a la fotografía desde diversos ámbitos: arte contemporáneo, videoarte, cine y docencia. Incorpora su proximidad con la naturaleza y la luz del Norte a su práctica artística. La luz es, de hecho, un elemento significativo de su trabajo, explorando y experimentando con ella.
PAC – Te proyectas desde Berlín. ¿Te hubiera gustado cambiar de lugar y hacerlo desde allí?
Irene Cruz – La vida me ha traído aquí y lo agradezco, esta ciudad me ha dado muchísimas oportunidades, muchos aprendizajes, descubrimientos, personas, mi luz… y al final esa fue la elección que acepto y abrazo totalmente. Me mudé aquí en 2013 llena de inspiración y ganas por apostar por mí y mi arte. Berlín es abierta para muchas cosas (sobre todo si hablamos de arte) pero para otras tiene sus durezas y trabas, como todo. Como artista siento que aquí tengo muchos más derechos, ayudas, oportunidades… En Berlín, como artista emergente, tienes otro régimen fiscal más justo si lo comparamos con España, se hizo mucho más fácil empezar. Aun así, no creo que haya ningún lugar idílico. Pienso que en Madrid (de donde soy originariamente) no me hubieran hecho caso si no me hubiese ido fuera, pero quién sabe, quizá se trate solo de una conjetura sin más.
PAC – ¿Crees que tu trayectoria habría sido la misma?
Irene Cruz – No. Creo que el hecho de haber crecido y madurado como persona y como artista en otra ciudad (y como emigrante) me ha hecho reflexionar sobre temas distintos a los que hubiera desarrollado si me hubiese quedado “en casa”. Mi búsqueda y mi vida habrían sido otras y yo concibo mi obra como un espejo de todo lo que ocurre en mi interior, en mi evolución y trascendencia.
PAC – ¿Qué te impulsa a dedicarte a la práctica artística?
Irene Cruz – El alma misma. Tengo la gran suerte (o como a veces le llamo: “la maldición más bonita del mundo”) de haber descubierto muy pronto qué es lo que yo quería aportar a este mundo y soy fiel a esa esencia. Me llena de vida crear mis obras (sobre todo en formato fotografía y vídeo), compartirlo con los demás, inspirarme e inspirar. Volver a revisarlas después de un tiempo como quien plasma sus emociones en un diario y lo relee. Pensar y sentir, revivir las imágenes y reinventarme nuevamente.
PAC – ¿Qué ansiabas?
Irene Cruz – Conocerme a mí misma, escuchar(me), ver(me), reflexionar, conectar, compartir. Desde muy pequeña la fotografía ha sido un lenguaje con el que comunicarme con el mundo -me atrevo a decir que más incluso que las palabras-. Siempre he tenido un entusiasmo muy grande por la creatividad y es un regalo. De alguna forma mi arte es el legado que quiero dejar en el mundo y ojalá lo que hago sea interesante o inspirador para los que vengan detrás.
PAC – ¿Lo encontraste?
Irene Cruz – Creo que es un proceso cíclico, no voy a “encontrar” nada del todo, simplemente una pregunta me llevará a otra. A lo que llaman “estilo propio” lo encontré en Berlín en 2011, quizá por eso sigo explorando por aquí. Fiel a mi azul del norte.
PAC – ¿Qué crees que puede mejorarse en el Sistema del arte?
Irene Cruz – Que se valore más. Que realmente haya más ayudas a los creadores que demuestren dedicar su vida a esta labor. En mi vida me he encontrado muchísimas personas que me han dicho que eso no es un trabajo, que es un hobby. Yo siempre he puesto mi energía en demostrar lo contrario. Me gustaría que en el sistema educativo se acompañe al pensamiento reflexivo. Enseñar que la creación artística no es algo ajeno de un sistema para “culturetas” (o incluso elitistas). Todo el mundo disfruta de muchas formas de arte: el cine, las series, la literatura, la música… El arte tiene que ser para tod@s: expresivo, valorado, creado desde la honestidad del artista, compartido, disfrutado, entendido. También el arte puede o no ser estético, en el estilo de cada un@ ya no me meto, pero si es verdad que hay piezas puramente decorativas que no dicen nada, y no voy a entrar en la gente que por arte entiende los cuadros del Ikea.
De 2012 a 2020 he tenido la oportunidad de ser representada por buenas galerías, de vender en ferias y festivales de todo el mundo, de ganar premios… Eso de alguna manera ya no está tan presente en mi vida y tampoco lo echo de menos. Me da pena vender menos que antes, claro está, pero he descubierto otras vocaciones como la enseñanza o el cine. Por supuesto sigo haciendo mi trabajo personal, pero en estos momentos no me fluye el mundo galerístico.
Por otro lado, es a veces injusto que este sistema cada vez más se basa en quitarle energía al artista (por ejemplo: en forma de dinero, “tú lo haces todo porque yo te prometo promoción”, pagar fees de sesenta euros por presentarse a convocatorias, etc.). Nos pasamos el día creando contenido para redes sociales y cuando a alguien le dices “si quieres apoyar lo que hago por dos euros en Patreon” te hacen “ghosting”… es realmente desmoralizador a veces. Nos obliga a reinventarnos continuamente y eso es agotador. Eso sin, ni mucho menos, menospreciar a la gente que me apoya, porque gracias a ellos es que tengo fuerzas y razones para seguir, honestamente.
Y por último, creo que el arte debe adaptarse (de verdad) a estos nuevos tiempos digitales. Es innegable que existe el criptoarte, pero para mí, después de estudiarlo en detalle, no deja de ser un hype. En general no se explora en serio y por eso es una de las áreas en las que ofrezco formación. Me gustaría que la gente lo viera con más profundidad y se atreviera a descubrirlo. La mayoría de los que crean NFT’s es para probar porque “total, si gano algo pues ahí está”.
PAC – ¿Qué deberíamos aportar y eliminar al Sistema?
Irene Cruz – Creo que lo he explicado en la pregunta anterior, pero en resumen:
Aportar: Educación: que lo bueno no es lo que está de moda o lo que hace el artista endiosado de turno, que esto es una carrera de fondo, y que detrás de toda obra hay un discurso y una evolución, una trayectoria. En mi caso particular, me encanta enseñar, y en Patreon.com/irenecruz/ tengo cursos y clases de NFT, de Redes sociales, de recomendaciones acerca del mercado, de galerías, de producir obra, certificados… y de términos legales y cláusulas que se deben aceptar y no. Creo que eso es algo que yo puedo aportar al mundo y por eso he creado esta comunidad que funciona por suscripción desde dos euros al mes (está activa desde julio 2020).
Eliminar: El elitismo, lo carca, la precariedad, la desinformación, lo que no se adapta a los tiempos, los fees injustos a los artistas, que siempre se promocione a los mismos aunque no evolucionen, que el sistema pretenda que todos vamos a tener la capacidad de vender nuestras propias obras solo por estar en X galería o por tener X seguidores en Instagram…
PAC – Asociacionismo profesional ¿qué opinas?
Irene Cruz – Actualmente pertenezco varias asociaciones pero todas son más en el ámbito del cine (la Asociación Española de Directores y Directoras de Fotografía [AEC] y la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales [CIMA]. Soy parte porque es una vertiente nueva de mi trabajo y me interesa y me aporta estar en contacto con otros profesionales y las actividades que organizan.
En el caso del arte contemporáneo, he participado en asociaciones pero todas han ofrecido condiciones precarias, o pagar, o trabajar por muy poco dinero por la asociación… pero creo que tendría más sentido realmente reivindicar derechos y explicar la labor del artista en la sociedad, desde adentro para afuera, no dentro de nuestro mundo. Conseguir ayudas y mejores condiciones para tod@s, no siempre mirar por unos pocos.
PAC – Háblanos un poco de tu trayectoria.
Irene Cruz – Comencé mi carrera profesional en 2011, al acabar mi doble licenciatura en Publicidad y Relaciones Públicas y Comunicación Audiovisual. Después decidí cursar un máster en fotografía conceptual y artística en la Escuela de Fotografía y Técnicos de Imagen [EFTI] y fue allí cuando tuve claro que quería desarrollar mi obra, exponer, estar en el mercado. En 2013, me dieron una beca para estudiar cinematografía. Ya en Berlín, un galerista de Asturias me escribió por Facebook (donde yo publicaba mis fotografías sin un propósito mayor que compartirlas con mi pequeña comunidad) y me ofreció representar mi obra. Empecé a participar en ferias de arte, la primera fue Room Art Fair ese mismo año, más tarde Art Madrid, ARCOmadrid… Desde entonces no he parado de exponer, de crear, de moverme (aquí y allá con distintas galerías internacionales). El 80% de mis ingresos eran la venta de mi obra. En 2016 gracias a salir en diario El País durante la feria Estampa, un director de cine (Alejo Moreno) me contactó para dirigir la fotografía de su primera película (y ahí empezó mi carrera como cineasta). En 2020 la vida nos cambió a tod@s en mayor o menor medida. Actualmente estoy abriéndome paso en el cine alemán (gracias a mi amigo Alejandro M. Bravo que me conectó con el director Jan Eilhardt, con el que he hecho ya dos películas). En estos momentos, apenas hago exposiciones como antes, las galerías que me representaban han ido cerrando. Mi trabajo, aparte del cine, se centra en la enseñanza (dentro de mi propia plataforma en patreon.com/irenecruz o en escuelas y universidades), en encargos de marcas comerciales (recientemente he estado trabajando para Dior), estoy probando como micro-influencer dentro del nicho de la fotografía y el vídeo… (Trabajo para marcas como Canon, Robisa, Peli, Lomography…) nunca sabes dónde te va a llevar la vida.
PAC – Defínete mediante hashtags o etiquetas.
Irene Cruz – #IreneCruz #Fotografa #Azul #ContemporaryArtist #VideoArtist #Berlín #PatreonCreator #FemaleFilmmaker #CinemaJunkie #WomanInFilm #Intensita #Mística #Espiritual #ScoliosisWarrior #GeminisCancerEscorpioTauro
PAC – ¿Cuáles son los temas de tu trabajo artístico?
Irene Cruz – Mi obra manifiesta el misterio, la intimidad. Declara al ser humano como parte de la naturaleza y atestigua su integración en el paisaje…. El paisaje que se puede contemplar en mis imágenes siempre tiene un papel emocional. Me interesa trabajar lejos de la personalización, cerca de representar emociones y sentimientos universales, de ahí la ausencia de rostros en general.
La fotografía es para mí es un lenguaje nativo. Desde muy pequeña me comunico a través de ella como conexión de mi persona con el entorno. Entiendo el arte como una búsqueda, una terapia y una herramienta que me lleva a la constante transformación espiritual y profesional. Mi obra es siempre un espejo de mi universo interior, de mi posición frente al mundo, y una reflexión de lo que me toca vivir en cada momento de mi vida.
La característica más distintiva de mi obra es la luz. Busco los límites del anochecer y el amanecer, mi luz es azul, fría. Siempre he sentido una gran atracción por la iluminación tenue e íntima, sutil, serena, que envuelve el escenario. Creo desde lo “liminal” (desde ambos lados de una frontera o umbral); quiero decir, estar entre el día y la noche, la tranquilidad y la inquietud. Me muevo y exploro el lugar que existe entre las distintas polaridades porque para mí no hay límites. Hay caminos, puentes… Y al final: La naturaleza siempre gana, es la mayor inspiración, lo es todo.
PAC – ¿Algún proyecto, pendiente, que te gustaría realizar?
Irene Cruz – Mi documental sobre la escoliosis. Una película experimental en la que llevo años trabajando, pero evidentemente soy nueva en esto del cine (y más aún como directora/productora) y no estoy segura de tener aún los apoyos adecuados. Ahora mismo estoy un poco bloqueada con ello, pero espero que fluya tarde o temprano.
PAC – Un deseo.
Irene Cruz – La paz. Ser consciente y responsable. Comprender y sentirme comprendida.
